En un nuevo y desafiante desarrollo de investigación, un equipo dirigido por el físico Christoper Chyba de la Universidad de Princeton afirma que han logrado desarrollar un dispositivo que puede aprovechar la energía de la rotación de la Tierra para generar electricidad. Este intento innovador, aunque todavía se encuentra en etapa experimental, ha atraído mucha atención y discusión.
Los resultados del equipo de Chyba se publicaron en la revista Physical Review Research. Según el documento, el dispositivo utiliza ferrita débil de manganeso-zinc como conductor y está equipado con los electrodos correspondientes. El equipo de investigación colocó inteligentemente el dispositivo en un ángulo específico (17 grados) para asegurarse de que fuera perpendicular a la dirección de rotación de la Tierra y al campo magnético. Después de los experimentos, se sorprendieron gratamente al descubrir que el dispositivo generó con éxito 0 microvoltios (μV) de energía eléctrica.
Sin embargo, los resultados de este experimento no fueron inmediatamente aceptados por la comunidad científica. Otro artículo publicado en la revista Nature es cauteloso, argumentando que el descubrimiento, aunque intrigante, produce tan poca energía eléctrica que es difícil descartar la posibilidad de interferencia de otros efectos. De hecho, esta energía eléctrica débil es solo una fracción del voltaje liberado por la descarga de una sola neurona.
Paul Thomas, físico emérito de la Universidad de Wisconsin-Eau Claire, también expresó sus dudas. Argumenta que la idea de utilizar la rotación de la Tierra para generar electricidad es en sí misma contraria a la intuición, un debate que en realidad ha existido desde la época de Faraday. El físico retirado Rinke Wijngaarden no observó un efecto similar en sus experimentos, por lo que se mostró escéptico sobre la teoría del equipo de Chyba.
Teóricamente, el paso de un generador a través del campo magnético de la Tierra produce una corriente eléctrica, pero el campo magnético de la Tierra en sí mismo es estacionario. Esto puede desencadenar un realineamiento de electrones, creando una fuerza de reacción que contrarresta el efecto de generación de energía. En respuesta a este problema potencial, el equipo de Chyba afirma que han encontrado un material especial que evita eficazmente el reordenamiento de los electrones, manteniendo así estable la fuerza electrostática dentro del dispositivo.